APPLUS: Bush, Bin Laden y otros
Carlyle Group de la que son accionistas las familias Bush y Bin Laden, es una corporación norteamericana de capital riesgo dedicada a hacer inversiones ha adquirido la empresa catalana APPLUS de certificaciones y encarregada de la revisión de ITV del parque automovilistico de Catalunya.
La empresa de certificaciones Applus, ostenta el 50% (en el pasado fue el 83%), de la gestión de los servicios de estaciones ITV que revisan el parque automovilístico de Catalunya. La ITV era un servicio público de inspección técnica antes de su privatización a manos de Applus. Esta empresa de la que eran propietarios Aguas de Barcelona/La Caixa (53,1%), Unión Fenosa (25%) y Caja Madrid (21,9%) fue adquirida el verano pasado por la corporación de capital riesgo Carlyle Group con sede en Estados Unidos. Entre los principales accionistas de esta corporación se encuentran algunos conocidos políticos y hombres de negocios: George Bush padre, la familia Bin Laden, James Baker (ex-secretario de estado de EE.UU.), John Major (ex-primer ministro de Gran Bretaña), Frak Carlucci (ex-director de la CIA y ex-secretario de Defensa de EE.UU.) y el conocido especulador financiero George Soros. Mientras la dirección de la empresa recae sobre otro conocido, Olivier Sarkozi, hermano del actual presidente de Francia.
Carlyle es una corporación que gestiona fondos por valor de 81.000 millones de dólares en 47 fondos de inversión diferentes. Entre sus actividades figuran, como para tantas otras empresas similares de capital riesgo, buscar empresas que ofrezcan garantías de ganancias rápidas, o que atraviesen crisis para sanearlas y después venderlas, también invierten en fondos de inversión muy especulativos, con lo que obtienen rápidos beneficios para sus inversores. Carlyle Group tiene, entre otras actividades, fuertes inversiones en empresas petroleras, pero las más llamativas son sus inversiones en industrias militares de EE.UU., tales como Landmark, Indigo y Unit Defence.
Lo sorprendente de la operación de adquisición de Applus por parte de Carlyle, es que ha sido realizada mediante la utilización de los activos de la misma Applus para financiar su adquisición. De este modo, del valor de la compra de 1.485 millones de euros, Carlyle tan sólo ha desembolsado 400 millones, mientras que el resto (1.085 millones de euros) ha sido financiado mediante un crédito sindicado de La Caixa, Caixa de Catalunya y Caja Madrid.
El Gobierno de la Generalitat de Catalunya ha aprobado la operación sin muchos reparos y se ha limitado a exigir que un 25% del capital social continúe en manos catalanas. Así, Caixa de Catalunya, Caixa Sabadell, Caixa Manresa, Caixa Tarragona, Caixa Terrassa y el RACC serán los nuevos socios del accionista mayoritario Carlyle que ostenta el 75% restante.
A partir de ahora la ciudadanía de Catalunya cuando lleve su coche a revisar a una estación de ITV, tiene que saber que está entregando dividendos a la familias Bin Laden, Bush y otros conocidos benefactores de las guerras preventivas llevadas a cabo en Afganistán e Irak.
