El pasado 18 de enero, el gobierno español cedió, por el simbólico precio de 1 euro, ocho juegos de lanzamiento de bombas rompedoras CLB-30 de aviación valoradas en 86.848 euros, destinados a los cazabombarderos del ejercito marroquí. Según expresaban las agencias de prensa, el motivo era "fortalecer la especial relación de hermandad existente entre las fuerzas armadas de España y Marruecos". Sin embargo, Marruecos es un país en la lista de países en conflicto (Sahara) o que violan los derechos humanos con lo cual esta operación de hermandad, aunque sea al precio de 1 Euro, contraviene la ley de control de comercio de armas aprobada en diciembre de 2007 por el senado español. Marruecos, además, es el país del Magreb que destina mas presupuestos al armamento de toda la zona, por delante de Libia, Argelia y Túnez, por este orden.